El zorzal patagónico es el consuelo de los Observadores de Aves en los días fríos del otoño. Residente permanente, habitante del bosque y las periferias y compañero del hombre en zonas urbanizadas, lo podemos ver constantemente en jardines y patios de nuestras casas.
Llega por la mañana y la tarde y si se siente cómodo, se quedará entre los árboles y arbustos de la zona. Desde allí nos brindará su canto. Se alimenta de lombrices -es muy interesante ver cómo las busca y las encuentra- y otros insectos en verano. Pero en esta época prefiere lo que encuentre: frutos, semillas, etc.
Es fácil identificarlo: pico, periocular y patas color naranja amarillento, cabeza con boina negra, garganta estriada, dorso pardo oscuro y vientre más claro, primarias y cola negruscas.
En otoño deberíamos ver ejemplares inmaduros y maduros.
Podemos disfrutarlos en el jardín o el patio de casa mientras esperamos la primavera.
es increíble la cantidad de sonidos que hace... Saludos!
ResponderEliminarHola Soy de Ushuaia y me encanta verlos e mi jardín, hicieron varios nidos y se la pasan revoloteando por los alrededores, hasta alguno de ellos se pelea con mi gato!!!!!
ResponderEliminarSoy de Bariloche. Son re graciosos, un día se instalo una familia en mi casa pero se fueron ya que mi perra maldita mato un pichón que hace poco volaba.
ResponderEliminarGritan muy fuerte cuando están el peligro.
Ayer tuvimos la primera nevada del 2020 y hoy están felices comiendo los frutos de los Sorbus de mi jardín. Yo los observo con mis binoculares desde adentro y disfruto viendo lo felices que se los ve.
ResponderEliminar